Hiperplasia Prostática Benigna (próstata agrandada)

Hiperplasia Prostática Benigna (agrandamiento de la próstata)

La próstata es una glándula genital masculina situada debajo de la vejiga, alrededor de la uretra, el tubo a partir del cual la orina fluye hacia afuera.

La próstata produce una secreción (líquido prostático) que participa en la formación del fluido seminal. En el nacimiento, la próstata es del tamaño de una almendra.

Durante la pubertad, cuando el volumen de esta glándula aumenta debido a la presencia de hormonas masculinas (andrógenos) como el estimulante.

Alrededor de los 50 años para la mayoría de los hombres, el volumen de la próstata continúa aumentando al momento de apretar la uretra y por lo tanto se deriva numerosos problemas urinarios.

Fisiológico

Primeros signos de obstrucción

Obstrucción total

Una patología frecuente, presente en el 50% de los hombres mayores de 50 años y el 88% de los hombres con más de 80 años.

La irritación en la vejiga que sigue a la falta de aprobación de la gestión provoca trastornos muy frecuentes.

LOS SÍNTOMAS PRINCIPALES SON:

  • Aumento de la frecuencia de la micción
  • Chorro urinario débil
  • Vacilación al orinar
  • Goteo después de orinar
  • Necesidad de esfuerzos al orinar
  • Sensación de quemarse
  • Dolor al orinar

HPB DIAGNÓSTICO

El examen médico en este caso se trata de un examen abdominal físico, especialmente en el área del recto abdominal, lo que daria una idea del volumen de la glándula prostática y destaca la presencia de nódulos sospechosos; un cuestionario, llamado I-PSS, para analizar la gravedad de los síntomas se presentan también para el paciente. Después de eso, es necesario prescribir algunas investigaciones adicionales como una prueba de orina y la medición del PSA (antígeno prostático específico), pruebas de función renal y un uroflujometría (prueba que mide la velocidad del chorro de orina durante la mission). La prueba se realiza en un instrumento especial llamado medidor de flujo. Después de eso, dependiendo de las necesidades clínicas y terapéuticas, una ecografía transrectal de próstata, ultrasonido abdominal, examen urodinámico y una relación curva de presión-flujo puede también ser solicitada. Entre las complicaciones más comunes de la HPB esta un mayor riesgo de infecciones del tracto urinario debido a la retención de la orina en la vejiga. Hay dos tipos de tratamientos: el médico y el quirúrgico. El tratamiento médico emplea medicamentos para aliviar los síntomas, tales como alfa-bloqueantes. Estos relajan la próstata y cuello de la vejiga y por lo tanto aumentan el flujo de orina. Además de los bloqueadores alfa, se utilizan los inhibidores de la 5-alfa-reductasa. La terapia de asociación entre alfa-bloqueantes e inhibidores de la 5α-reductasa han demostrado éxito en la reducción drásticamente del volumen de la próstata. En caso de fracaso del tratamiento medico, un tratamiento quirúrgico puede ser necesario. Esto implica la recesión de la porción de la próstata a través de la uretra. Es importante no pasar por alto los primeros signos de una posible alteración de las vías urinarias y si se encuentra cualquier persistencia de los síntomas, es apropiado someterse a un examen médico. Determinar la causa de los problemas en una etapa temprana permite tomar medidas inmediatas con el fin de evitar o al menos retrasar la progresión de la enfermedad en una condición más grave que podría tener un impacto en la vida personal y social del individuo.

BPH no es ni cáncer, ni una etapa temprana de cáncer.